Siniestro de daños alimentarios refrigerados en nevera o congelador

Mediante una cobertura del seguro de hogar podemos cubrir los daños de siniestro por alimentos en mal estado debido a una avería de la nevera o congelador, o en el sistema eléctrico.

Estos alimentos, o en ocasiones medicinas, pueden quedar en mal estado y significar un riesgo si llegamos a ingerirlos.

En caso de un fallo de energía eléctrica, o en la instalación del hogar se deberá aportar un justificante de la empresa suministradora, y en caso de avería, deberá presentarse la factura por la reparación.

En el caso de que nos haya saltado el diferencial y solo haya sido en nuestro hogar, no será obligatorio presentar justificante ya que no podremos obtenerlo. Los justificantes se pueden obtener cuando es un fallo eléctrico generalizado.

Las exclusiones más comunes en esta cobertura son:

1- Cuando el frigorífico o congelador tiene más de 15 años.
2- Daños al propio aparato.
3- Cuando la paralización del suministro eléctrico es inferior a 6 horas consecutivas.
4- Daños que causan los bienes al deteriorarse.
Los límites de esta cobertura oscilan entre 300€, 600€, 750€, 900€ e incluso en algunos productos, con autorización de por medio, hasta 3.600€.

¿Cómo debemos de actuar en caso de un siniestro de este tipo?

Hay que hacer fotos de todos los alimentos o medicamentos que están dañados, con el objetivo de aportar la información o prueba visual para justificar dicho daño.
Sería una buena idea hacer una lista de todos los alimentos dañados indicando el coste de los mismos.