La historia comienza cuando un trabajador de 46 años y origen eslovaco es despedido por su empresa.
Al día siguiente cuando acude al centro de trabajo para recoger sus efectos personales, sufre la amputación de una pierna con una sierra radial, supuestamente de forma accidental.
A raíz de una denuncia, los agentes encargados de investigar el accidente, descubren que 3 meses antes esta persona había contratado 2 seguros que le garantizaban de 150.000 a 200.000 euros por amputación de un miembro. Además el hombre también había cobrado de la mutua de la empresa al alegar que fue un accidente laboral.
Tras la investigación, todas las pruebas del caso apuntaban a que el sospechoso se había autolesionado para cobrar, incurriendo presuntamente en tres delitos de estafa (dos a las compañías aseguradoras y uno a la mutua de trabajo).
Con todo esto nos hacemos una pregunta…¿Cuanto vale una de tus piernas?