Hablar de criptomonedas está de moda, por eso, mucha gente está pensando en invertir y comercializar con ellas. Si has oído hablar de Bitcoin, ya has dado el primer paso a este mundo. En términos generales podemos decir que las criptomonedas son todas aquellas monedas digitales que han surgido desde 2009, año en el que apareció la primera: Bitcoin. El objetivo de Bitcoin era ser una moneda para hacer compras únicamente a través de internet.
La gran mayoría de estas monedas virtuales son independientes y descentralizadas, esto quiere decir que ningún Estado, institución financiera, banco o empresa puede controlarla y sus usuarios son anónimos. Se trata de dinero intangible que puede ser utilizado como medio de pago al igual que hacemos con el dinero físico.
Estas monedas se pueden almacenar en monederos virtuales para posteriormente utilizarlas como medio de pago. En los últimos meses han tenido gran popularidad por la posibilidad de especular con ellas debido al constante cambio de su valor.
Ha sido duramente criticada por su utilización, ya que sus usuarios actúan de forma anónima y puede ser empleada para transacciones fraudulentas. También ha recibido críticas por su alto consumo de energía, comparado este 2018 con el uso energético de todo un país como Argentina.
¿Qué tecnología hay detrás del Bitcoin?
La moneda virtual utiliza la criptografía para controlar su creación. Es decir, existen unos ordenadores llamados mineros o “miners” programados para generar Bitcoin.
La plataforma en la que se basan las operaciones de la criptomoneda se denomina “blockchain” o cadena de bloques, que para muchos ya es una auténtica revolución. Básicamente, la cadena de bloques elimina los intermediarios de las transacciones (por ejemplo, los bancos) y actúa como un gigantesco libro de cuentas donde todo está enlazado y cifrado manteniendo siempre la seguridad y privacidad de las transacciones.
Monedas más utilizadas
Desde la creación de Bitcoin, han aparecido muchas otras monedas virtuales con diferentes características y modos de uso (más de 1400). Ether, Litecoin y Ripple son algunas de las más populares:
– Ether– Basada en la plataforma Ethereum, es considerada como la gran alternativa al Bitcoin. Para muchos expertos, esta moneda llegará a superar en valor de Bitcoin. El uso del Ether va más allá del financiero: su fin es descentralizar programas y aplicaciones informáticas para su disponibilidad a en todo el mundo.
– Litecoin– Se trata de una criptomoneda casi idéntica a Bitcoin pero más rápida y accesible, con la cual se pueden realizar pagos casi al instante. Es muy útil para aquellos que necesitan realizar transacciones rápidamente.
– Ripple– Aunque la moneda virtual se creó para evitar su control, Ripple está pensada para ello. Comenzó su desarrollo en 2004, mucho antes de la creación de Bitcoin y, a diferencia de este, no se basa en la tecnología blockchain. Es centralizada y requiere conocer la identidad de quienes la utilizan. Con Ripple, los bancos pueden hacer intercambios más rápidos y con menos costes. En España, Banco Santander y BBVA ya operan con ella.
Nadie sabe qué futuro les espera a las criptomonedas, lo que si tenemos claro es que su tecnología (blockchain) tendrá un gran impacto en un futuro casi inmediato. Si necesita más información, póngase en contacto con nosotros.